Existe un bar en Bielsa, el Chinchecle, donde el camarero guarda una zanfona detrás de la barra, y en un momento determinado de la noche apaga la música y se toca unas piezas...
Con el paso de los años, he acudido varias veces a ese garito, y la verdad es que nunca he visto al dueño ponerse a tocar (aunque he tenido el placer de verlo y escucharlo en algunas salas de conciertos y CDs), pero sí que me parece éste, un sitio mágico donde merece la pena hacer un parada si pasas por la zona y disfrutar de su música, decoración, quesos, embutidos, la estufa de leña, licores...
Amigo Surfer, tomo nota del lugar porque parece muy atractivo, tiene un encanto mágico, si alguna vez voy por Bielsa, entrare sin dudarlo porque son del tipo de tabernas que me gustan.
ResponderEliminarBonita y original entrada.
Saludos.
una cecina impagable. doy fe.
ResponderEliminarGracias. Merece la pena hacer una parada si vas por esa zona, lo que no es seguro, es que esté abierto. Creo que solo abre los puentes y fiestas largas.
ResponderEliminarUna taberna que nada tiene que ver con el paisaje hostelero que puebla en los Pirineos y otras zonas de turismo masivo.
ResponderEliminar"EL Chinchecle", después de tantos años abierto, sigue siendo una lugar de referencia, una parada obligada para todos los amantes de la buena música, comida y licores varios...
Por cierto, en tus visitas habrás tenido mala suerte, pues su dueño, el amigo Luismi, gusta de darle "a la manivela" siempre que tiene un rato de descanso...
Y para este verano de 2013 ha organizado varias actuaciones de pequeño formato, la primera, este próximo domingo 21 de julio.
Salud!!
-Pedro Mari-
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Bueno... pues seguiré intentando... es una buena excusa para seguir pasando por allí. Y lo del 21 tiene buena pinta. A ver por donde ando. Un saludo!!!
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