Con sus 2005 metros de altitud el Erata es uno de los tres dos miles que flanquean el Sobrepuerto. Desde su cima podemos contemplar una preciosa panorámica y alli, al pie de la montaña, OTAL. Todo ello hacen que el Erata tenga un encanto especial.
A menos de 5 minutos de la cima, nos encontramos con una de las ermitas situadas a mayor altitud “San Benito de Erata”.
Esta ermita se encontraba en ruinas y fue restaurada por la asociación “Erata” de Biescas durante varios fines de semana de 2006 y 2007.
Esta pequeña ermita tiene detrás una historia antropológica muy interesante, según pudimos leer en el cuaderno de notas que encontramos en el interior.
Formó parte de una estrategia de cristianización de estas montañas por parte de los monjes benedictinos allá por el siglo XI junto con el Monasterio de Leyre, el de San Juan de la Peña, el desaparecido monasterio de Ballarán y la ermita de San benito de Orante.
Visto desde Orante, en el solsticio de verano el sol sale por Erata y se esconde por Leyre. En el invierno el sol sale por Ballarán y se pone por San Juan de la Peña.
Antiguamente, los vecinos de Otal subían hasta esta ermita con botellas de agua bendecida para prevenir las tormentas y pedregadas.
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| En el interior de la ermita nos encontramos con una pequeña hornacina de Piedra con la talla San Benito de Nursia flanqueado por el Sol y la Luna |
Sin duda hay que reconocer y agradecer el trabajo de las personas que de forma desinteresada restauraron esta ermita. Es muy triste ver que las pocas cosas que se mantienen en pie en estos lugares es por el esfuerzo, el empeño y el trabajo de personas que de forma voluntaria siguen apostando, creyendo y admirando el valor de estos parajes.
Mientras, el ayuntamiento de Broto (municipio al que pertenece o por lo menos antiguamente pertenecía), asiste impasible al deterioro y pérdida de todo un patrimonio cultural, antropológio e histórico.
Hace unos meses cayó la iglesia de Otal (uno de los tesoros del Sobrepuerto) pero en breve le seguirán la Iglesia de Escartín, la torre Bergua... Eso sin mencionar todo lo que ya se ha caído y nunca se podra recuperar…
Tuve la suerte de trabajar en la restauración de esa ermita. Solo por los cuatro o cinco días que pasamos allá arriba ya mereció la pena.
ResponderEliminarRespecto a lo del excelentísimo y acojonantísimo ayuntamiento de Broto, su actitud hacia ese espacio privilegiado es patética y vergonzosa. Algún día, cuando se me pase el cabreo, ya os contaré algo sobre una beca que sacaron para "investigar sobre historia, arte, geografía humana o antropología"
Vergonzoso e ilegal que se trapichee así con dinero público.
Por lo demás, gracias por la parte que me toca y me alegro que te gustara
hace dias ke rondaba ste blog y me daba a mi ke tnias ke ser tu amiga diapleron. Hoy lo he confirmao. Daros la Enhorabuena por ste blog es precioso. ojala cumplas tus sueños diaple y t vengas pa la montaña, pork estas montañas necesitan d gente como tú. Seguir así.
ResponderEliminarEso, eso. Más diapleróns y menos aramones, nozaledos...
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